¿Sabe quién soy yo?

Quedan pocos días de colegio y muchos alumnos, especialmente los mayores, aprovechan para hacer balance. Todos están deseando terminar las clases, tienen la cabeza en el verano, la playa, el descanso, etc. Pero también son conscientes de todo lo que dejan atrás. Los que acaban el colegio o instituto y se incorporan a la universidad empiezan una nueva vida; nuevos compañeros, nuevos profesores, en muchos casos nueva ciudad para vivir. Cuando pasan los años y se les pregunta cuál es la principal diferencia entre el colegio y la universidad siempre dicen lo mismo; el colegio es una pequeña familia, conoces tus compañeros desde chicos, los profesores te conocen, saben tu nombre, se preocupan por ti. En la universidad el trato es distinto, son demasiados alumnos, demasiadas clases, horarios a veces disparatados.

Recuerdan con cariño a algunos profesores tanto del colegio como de la universidad que desde el primer día pusieron esfuerzo por aprenderse sus nombres, incluso les felicitan por su cumpleaños, si faltan a clase les mandan un mail preguntándoles si están enfermos, en definitiva, los profesores que saben que enseñan más con el buen trato, el esfuerzo por ser cordial y preocupándose por los demás, que los profesores que simplemente imparten una asignatura. No enseñamos solo con los libros.