Te quiero más que a mis galletas

Me ha enviado una madre esta pequeña historia que le ha sucedido esta mañana:

Estaba haciendo la casa cuando de repente se me ha acercado mi hija pequeña, con lágrimas en los ojos y me ha abrazado muy fuerte. Asustada le he preguntado qué le pasaba y me ha respondido así:

- Mamá a ti te quiero más que a mis galletas.

- Eso ya lo se, pero ¿por qué me comparas con las galletas?

- Porque todas las mañanas cuando me levanto lo primero que hago es darte un beso y decirte que te quiero, y hoy se me ha olvidado y al levantarme he ido a por mis galletas para desayunar, y cuando te he oído me he acordado de que no te he dado un beso y no quiero que pienses que te quiero menos que a las galletas.

Querer a alguien no es solo un sentimiento, es algo que se debe demostrar día a día con nuestras obras. Debemos aprender a querer a las personas "más que a las galletas", y saber demostrárselo. Como dice el dicho castellano, "obras son amores y no buenas razones".

Comentarios